martes, 8 de julio de 2014

Golpean y mancillan a humilde mujer.

La ola de incertidumbre que ha provocado la falta de vigilancia policiaca daña a los más desprotegidos. Por Tadeo Herbert. Las decisiones tomadas por quien gobierna en las cuestiones de Seguridad Pública, han provocado que la falta de certeza se convierta ya en una ola de incertidumbre que amenaza, vapuleando como siempre a los más desprotegidos y a los que menos tienen. Los cambios que parecen interminables en las instituciones policiacas e investigadoras no están dando frutos, ya que la estrategia utilizada de quitar y no poner, está provocando un repunte en los delitos del orden común. Los asaltos a transeúntes, los robos domiciliarios y los atracos a negocios establecidos, se mantienen estadísticamente a la alza, sin vislumbrarse el fin del presente y el inicio de una nueva etapa donde imperen la ley y el orden. Mucho por hacer en las cuestiones de otorgar certidumbre a la ciudadanía, la cual luce harta de ver afectado su patrimonio de años o de quedarse intempestivamente sin el diario sustento. Es responsabilidad de quien dice gobernar, implementar tácticas y logísticas que sean viables y aplicables en beneficio de los ciudadanos. Son requeridas a la mayor brevedad posible tales implementaciones y que éstas vayan acompañadas de castigos más severos a quienes delinquen. Cada vez son más los afectados por delincuentes que utilizando armas blancas e incluso hasta armas de fuego, han sido amagados y atemorizados, al verse implicados en un asalto. Lo que es peor, han sido golpeados sin piedad por sus agresores al no llevar dinero consigo. En no pocos casos las damas inmiscuidas han sido violentadas sexualmente, como el día de ayer que apenas amanecía cuando una damita fue atacada por un sujeto al cual dijo no conocer. Luego de cometer tan ruin y bestial delito el agresor huyó con rumbo desconocido, dejando a la afligida mujer en medio del llanto, quien a duras penas pudo solicitar auxilio a los paramédicos de la Cruz Verde, para que la trasladaran al nosocomio local de la Avenida Canales. Al arribar a la sala de emergencias fue atendida por el galeno de guardia y por la trabajadora social, a quien dijo ser habitante de la colonia las Granjas y que los amargos hechos habían ocurrido al costado poniente de la Avenida Pedro Cárdenas. Cabe mencionar que nos reservamos el nombre y dirección de la afectada, por razones obvias. La desconsolada mujer presentaba golpes en el cuerpo y algunas escoriaciones en la piel, lo cual mostró la violencia de que fue objeto. Las autoridades ministeriales tomaron conocimiento del hecho y serán las investigaciones pertinentes al caso, las que den con el paradero de la bestia humana que atacó a la indefensa mujer.