miércoles, 5 de mayo de 2010

La PROFECO y el SAT no regulan a los ambulantes.


Por: Emilio Vazquez Alexandre.
Uno de los temas mas trillados en el ámbito periodístico es el ambulantaje y este por muchos factores se ha convertido en un fenómeno social.
Es en los últimos años que tal esquema económico se ha desarrollado más y podría ser llamado a convertirse en un modelo a seguir ya que produce ganancias infinitas.
No existe ciudad en el país que no este llena de vendedores ambulantes que ofrecen diversos productos al público.
No falta quien diga que es un resultado de los errores económicos de antiguos gobernantes que no supieron que hacer con el cargo encomendado.
Otros pensaran que es producto del contrabando pues en ocasiones les es mas barato vender de esta forma que pagar los impuestos legales.
La realidad es que esta ahí cada día más y nadie lo puede detener, ni encontrar una solución inmediata al respecto; tan solo aceptar tácitamente su crecimiento.
Aquí en San Fernando los hay en demasía, incluso hay personajes que como las grandes cadenas tienen sucursales donde expenden los mismos productos y al mismo precio.
También llegan comerciantes foráneos y estos permanecen en ardua competencia con los negocios locales, a los cuales dejan en desventaja dadas las características en la forma de ejercer los tratos y el precio al por mayor.
No hay regulación por parte de quien corresponde en este caso especial de los mercaderes foráneos. Los negociantes del municipio alegan una desleal competencia.
Los que expenden mercancía traída de otras tierras no dan garantía de lo vendido, no habrá a quien reclamar en caso de que así fuera necesario.
Los comerciantes establecidos envían un mensaje a la PROFECO y al SAT local para que “metan en cintura” a dichos personajes ya que dañan la economía familiar y en consecuencia la local.