No son pocos los que se preguntan, si es seguro que conduzcan las personas de la tercera edad. Habrá quien diga que estos conductores son un peligro tras el volante, poniendo como excusa que existe indiscutible pérdida de habilidades. Obviamente que quienes lo realizan no están de acuerdo con ser prejuzgados de tal manera, ya que cuando conducen dicen que extreman precauciones, logrando con ello ser excelentes guías de sus vehículos automotores. Todo indica que no es insegura la conducción por parte de los adultos mayores, ya que a tal edad son maduros y responsables al conducir. Las estadísticas dan a conocer que son menos los percances vehiculares, en los que resultan implicados estos conductores. La tasa de incidencia en accidentes automovilísticos, es menor en relación con los demás y cada vez son más los que diariamente circulan por las calles y avenidas de la ciudad. Es indiscutible que habrá quienes tengan pérdida visual, por enfermedades como glaucoma o cataratas, patologías en el corazón o mal de Parkinson. Poco vigor físico, mala audición y fallas en la memoria, estas personas tendrán problemas para conducir con plena certeza. Además quienes lo hacen deben evitar guiar sus vehículos de noche, con lluvia, deben trasladarse por rúas en buen estado e ir por las calles menos transitadas y claro está, manejar a la defensiva. Para quienes han conducido durante años, es difícil de la noche a la mañana, transformarse en simples pasajeros. Es recomendable que los conductores de edad avanzada, se realicen constantes chequeos médicos y psicológicos, para evitar que el guiar sus unidades motrices, se convierta en peligro latente. Si mantienen las precauciones al caso, respetando los señalamientos de vialidad y el reglamento de tránsito, el que conduzcan los adultos mayores no tiene porqué ser peligroso.
martes, 15 de julio de 2014
Conductores de la tercera edad
Por Tadeo Herbert.-
No son pocos los que se preguntan, si es seguro que conduzcan las personas de la tercera edad. Habrá quien diga que estos conductores son un peligro tras el volante, poniendo como excusa que existe indiscutible pérdida de habilidades. Obviamente que quienes lo realizan no están de acuerdo con ser prejuzgados de tal manera, ya que cuando conducen dicen que extreman precauciones, logrando con ello ser excelentes guías de sus vehículos automotores. Todo indica que no es insegura la conducción por parte de los adultos mayores, ya que a tal edad son maduros y responsables al conducir. Las estadísticas dan a conocer que son menos los percances vehiculares, en los que resultan implicados estos conductores. La tasa de incidencia en accidentes automovilísticos, es menor en relación con los demás y cada vez son más los que diariamente circulan por las calles y avenidas de la ciudad. Es indiscutible que habrá quienes tengan pérdida visual, por enfermedades como glaucoma o cataratas, patologías en el corazón o mal de Parkinson. Poco vigor físico, mala audición y fallas en la memoria, estas personas tendrán problemas para conducir con plena certeza. Además quienes lo hacen deben evitar guiar sus vehículos de noche, con lluvia, deben trasladarse por rúas en buen estado e ir por las calles menos transitadas y claro está, manejar a la defensiva. Para quienes han conducido durante años, es difícil de la noche a la mañana, transformarse en simples pasajeros. Es recomendable que los conductores de edad avanzada, se realicen constantes chequeos médicos y psicológicos, para evitar que el guiar sus unidades motrices, se convierta en peligro latente. Si mantienen las precauciones al caso, respetando los señalamientos de vialidad y el reglamento de tránsito, el que conduzcan los adultos mayores no tiene porqué ser peligroso.
No son pocos los que se preguntan, si es seguro que conduzcan las personas de la tercera edad. Habrá quien diga que estos conductores son un peligro tras el volante, poniendo como excusa que existe indiscutible pérdida de habilidades. Obviamente que quienes lo realizan no están de acuerdo con ser prejuzgados de tal manera, ya que cuando conducen dicen que extreman precauciones, logrando con ello ser excelentes guías de sus vehículos automotores. Todo indica que no es insegura la conducción por parte de los adultos mayores, ya que a tal edad son maduros y responsables al conducir. Las estadísticas dan a conocer que son menos los percances vehiculares, en los que resultan implicados estos conductores. La tasa de incidencia en accidentes automovilísticos, es menor en relación con los demás y cada vez son más los que diariamente circulan por las calles y avenidas de la ciudad. Es indiscutible que habrá quienes tengan pérdida visual, por enfermedades como glaucoma o cataratas, patologías en el corazón o mal de Parkinson. Poco vigor físico, mala audición y fallas en la memoria, estas personas tendrán problemas para conducir con plena certeza. Además quienes lo hacen deben evitar guiar sus vehículos de noche, con lluvia, deben trasladarse por rúas en buen estado e ir por las calles menos transitadas y claro está, manejar a la defensiva. Para quienes han conducido durante años, es difícil de la noche a la mañana, transformarse en simples pasajeros. Es recomendable que los conductores de edad avanzada, se realicen constantes chequeos médicos y psicológicos, para evitar que el guiar sus unidades motrices, se convierta en peligro latente. Si mantienen las precauciones al caso, respetando los señalamientos de vialidad y el reglamento de tránsito, el que conduzcan los adultos mayores no tiene porqué ser peligroso.
